Cómo vencer a la tristeza

Hay días en nuestras vidas que sentimos que nuestro corazón se desvanece de dolor. Es como si el cielo cayera sombre nuestros hombros y nos produzca desfallecer. Hay tristeza que nos paraliza. Las malas noticias acerca de nuestra vida o lo que ocurre alrededor nos hacen desfallecer.

Recuerdo que cuando estaba en el colegio, habían momentos de extrema tristeza en mi alma. Esto era debido a que estaba solo como cristiano, era el primero en mi grupo familiar en ser cristiano y pues sabes las dificultades que pasamos. Eso mino mi vida espiritual, de tal manera que entre en una tristeza enorme. Mi forma de respuesta era diferente cada día. Habían días que derramaba mi alma en oración y podía sentir al Espíritu Santo abrazarme. Otros días sentía el deseo de dejar la vida cristiana.

Nuestra vida espiritual es un camino por el que recorremos a diario. En ese camino encontramos fuentes de agua y alimento espiritual a los lados de este. Pero el camino no es uno fácil, el camino es uno rústico, lleno de piedras o no es una superficie nivelada. Paralelo a este camino hay otro lleno de luces, diversiones, satisfacción de nuestra carne. Al parecer ese camino es muy atractivo. Pero el problema es que ese camino no lleva a nada. Lo puedes tomar pero no te llenara. Tu alma quedara vacía y buscaras mas y mas de lo que te puede ofrecer. Al final no te llenara tu alma y espíritu, nos produce una muerte tanto espiritual y corporal.

Yo amo tanto el libro de Deuteronomio. En ese libro, Dios le dice a Israel, que lo ama pero le dice que si sigue el camino de vida, Dios los bendeciré enormemente. Pero si no, Dios, como Padre de amor, los corregirá (Deuteronomio 28 versículo 65). En lugar de bendiciones, vendrán una serie de problemas. Esto con el propósito de traerlos al camino nuevamente. Al final Dios les dice que el sabe que ellos se van a separar de El, se desviaran. Pero El esta con los brazos abiertos para perdonarlos y bendecirlos.

Esa es una de las fuentes de la tristeza, el abandonar el camino de Dios. Existen otras fuentes de la tristeza. Cuando seguimos a Dios y vienen situaciones que afectan nuestra vida. La tristeza es grande y las preguntas surgen, por qué.

En libro de primera de Samuel capitulo 1 versículo 18 nos habla de Ana, una mujer que seguía a Dios y le amaba y también a su esposo. Una buena seguidora de Dios. Pero esta no podía concebir hijos. Las costumbres judías eran que se debían tener descendencia sino algo malo habia en la vida de estos. Pero Ana no tenia nada malo espiritualmente. Un día Ana decide ir al templo de Dios y derramar su vida ante El. Era tanto su dolor que Eli, el sacerdote, pensó que estaba embriagada. Pero luego conoció sus problemas. Las suplicas fueron tan grandes que Dios bendijo a Ana con descendencia y fue una muy especial.

Este es un caso en el que Dios obra en favor al final. Pero hay otras ocasiones donde no es asi. En el libro de Segunda de Corintios capitulo 12 versículo 9, nos habla de Pablo, un hombre recto, cristiano de cristiano, predicador y teólogo excelente, que estaba pasando problemas difíciles. Cualquiera pensaría, la vida de este hombre estaba llena de bendiciones, prosperidad. Para los predicadores de la doctrina de la prosperidad, creo que no les suena mucho esta vida de un gran hombre de Dios.

Dios no quería que este hombre se perdiera debido a la soberbia, sino mas bien los problemas que tuvo en su vida tenia el propósito de que el buscara su dependencia de Dios. En medio de la enfermedad, Dios se manifestaba en su vida. Pablo sabia que podía tomar uno de los dos caminos, olvidarse de Dios que no le respondía y bendecía o seguir el camino de Dios. Al final este sabia que a pesar de todos los problemas, el camino de Dios es el mas alto y nos llenara espiritualmente. El cuerpo morirá pero el espíritu seguirá.

El libro de Isaias capitulo 35 versículos 1 al 10 nos habla de una futura bendición en Sion. Aquellos que hemos sido lavados con la sangre de Cristo seremos llenos de alegría, la tristeza saldrá de nuestros corazones pues sabemos que la vida futura para aquellos que siguen a Dios, sera gloriosa, llena de paz, amor y alegría pues estaremos delante de aquel que nos ama tanto.

Tal ves no veremos las grandes cosas que le ofrece el mundo a la vida. Tal ves no tenemos la mejor salud. Tal ves nos han dejado solos. Tal ves sientes que la vida no ha sido justa para contigo. Pero que nuestro corazón desfallezca. Sabemos que tenemos el Espíritu Santo que nos consuela. Derrama tu alma en oración, canta a Dios. Si los problemas no se van, déjaselas a Dios y no te preocupes mas, si es que no puedes solucionarlos. No abandones el camino de la verdad, mantente firme, sigue adelante, que nos espera en la otra vida, grandes bendiciones.

Dios te bendiga, es mi oración.